Mejora la dinámica y la conexión familiar
La terapia familiar es una forma de psicoterapia que se enfoca en la familia como un sistema. La premisa es que los problemas de una persona no existen en un vacío, sino que están intrínsecamente ligados a las interacciones y dinámicas de su familia. En lugar de tratar a un solo individuo, el terapeuta familiar trabaja con todos los miembros o con una parte de la familia para mejorar la comunicación, resolver conflictos y fortalecer las relaciones.
DSM-5 y CIE-11: Aunque los manuales de diagnóstico no clasifican la "disfunción familiar" como un trastorno, reconocen que los "problemas de relación familiar" pueden ser un foco de atención clínica, ya que tienen un impacto significativo en el bienestar y la salud mental de sus miembros.
La terapia familiar puede ser una herramienta poderosa para abordar una amplia gama de problemas, tales como:
Los terapeutas familiares utilizan diversas técnicas para ayudar a las familias a cambiar sus patrones disfuncionales. Algunas de las más comunes son:
La terapia familiar no se trata de culpar a nadie, sino de trabajar en equipo para sanar las dinámicas que causan dolor. El terapeuta es un guía imparcial que ayuda a la familia a encontrar sus propias soluciones. El número de sesiones varía según la complejidad del problema, pero el objetivo final es que la familia adquiera las herramientas necesarias para manejar futuros desafíos de manera independiente. Si los conflictos familiares te abruman, buscar terapia es un paso proactivo hacia el bienestar de todos.
Nota: Un terapeuta familiar debe tener una licencia y una formación especializada en terapia familiar y de pareja. Es fundamental elegir a un profesional cualificado para garantizar un tratamiento efectivo.